Todos estamos a la búsqueda de un amor perfecto. Los científicos nos explican que esa búsqueda tiene que ver con el funcionamiento de nuestras hormonas, antiguos rituales de cortejo o un "complejo materno" no resuelto. Es posible que haya algo de esto, pero debajo de estas explicaciones parciales, se esconde una profunda verdad espiritual.
Y esa verdad espiritual es que existe -en alguna parte de este inmenso Universo- un ser que puede amarnos mas allá de todo lo que conocemos: lo llamamos nuestra "alma gemela".
Almas o Llamas Gemelas
El alma gemela es algo diferente, es nuestra otra mitad.
En el origen, éramos entidades únicas, chispas de la Divinidad. Ante el Creador, acordamos descender al plano de la tercera dimensión a continuar la Obra Creativa, cumpliendo una Misión Conjunta. Dado que el mundo que conocemos es el reino de la dualidad, tuvimos que dividirnos en dos mitades. El plan consistía en vivir vidas separadas y cumplir funciones diferentes, hasta que -habiendo experimentado todas las formas de nuestras cualidades únicas a través de distintas encarnaciones y recuperado nuestro recuerdo de quien somos en realidad- estuviéramos preparados para el reencuentro. Una vez logrado éste, podríamos cumplir nuestra Misión Conjunta.
Puede estar encarnado o no, pero siempre que aparece en nuestra vida es para mostrarnos los aspectos elevados de nuestra alma y el camino hacia el cual dirigirnos para seguir creciendo. Nos acerca a nuestro propósito elevado.
Tenemos muchos compañeros de alma pero una sola alma gemela.
Lo que se siente cuando uno se encuentra con esta persona es algo que no se puede describir con palabras. Es un amor mas allá de toda dimensión.
A lo largo de la vida, van apareciendo distintos maestros que nos recuerdan que existe un alma gemela que encontrar (por ejemplo, personas que nos hablan del tema, libros que leemos, conferencias sobre el tema). Pero para que el recuerdo de quien es quien pueda resonar en nosotros y la unión se pueda producir, es preciso estar al mismo nivel de evolución.
Una vez que nos reunamos con el alma gemela, podremos viajar a otras galaxias, experimentar otras formas de vida o simplemente regresar flotando hasta el Centro de la Fuente de Creación.
Para que aparezca, hay que llamarlo. En lo posible a diario. Es un permiso que le damos para que se acerque.
Si creemos estar ante nuestra alma gemela y la persona no parece darse cuenta o nos rechaza, debemos entregar la situación al Universo. Lo mas probable es que ocurra alguna de las siguientes alternativas:
a) la persona cambia su actitud hacia nosotros, se acerca, cambia.
b) aparece otra persona con las cualidades necesarias para este tipo de vínculo.
Si tu alma gemela no ha aparecido aun, no tienes que preocuparte. Cada persona con la que te vincules es un maestro en el gran aprendizaje del amor. Trata de aprovechar al máximo cada encuentro personal y estarás más y más cerca de tu alma gemela. Si esta no ha aparecido es una señal de que todavía tienes mucha estructura que transformar en tu vida.
Características típicas de una relación con el alma gemela:
Para identificar una relación que podría caracterizarse como de "almas gemelas", busca los siguientes indicios:
1) A menudo no es nuestro tipo de pareja.
2) A nivel racional, uno podría presentar mil razones para no involucrarse con esta persona.
3) Sincronicidad de encuentros. El Universo parece confabularse para acercarnos a esta persona.
4) Surgen muchas intuiciones respecto a esta persona.
5) Sentimos una urgente necesidad de llamarlo o encontrarnos con él / ella.
6) Los roles suelen invertirse. Si éramos una persona que solía tomar la iniciativa, con esta persona asumimos una actitud mas pasiva.
7) Un patrón interesante que suele aparecer es que inmediatamente antes de encontrar el alma gemela hayamos estado involucrados en algún tipo de "amor imposible".
Una vez que nos liberamos de esto, el alma gemela suele aparecer. En general esto sucede muy rápido.